Es El Momento

 

-Es el momento de hacer.
-Pero ¿qué hacer?
-Lo que esté al alcance de cada uno.
-¿Urge?
-Si. Cada uno debe y puede hacer lo suyo, lo propio. Lo necesitamos.
-Deber y poder. Entonces, ¿dónde queda el querer?
-¿Y por qué no querrías hacer algo hoy, en el presente, para conectar con el planeta, honrarlo y cuidarlo?
-Conectar con todo eso significa conectar con la vida y no todos están dispuestos, preparados o atentos para conectar con la vida.
-¿Y qué es la vida?
-Algo tan vasto que no tiene forma de ser explicado, algo que nos excede, pero a la vez nos contiene. Lo simple, lo bello, lo efímero, lo concreto. Las personas que nos rodean… La pobreza, las guerras, el dolor, eso también es parte de la vida.
-Nuestro mundo, en este planeta.
-Si, nuestro mundo en este planeta. Y respetarlo significaría renunciar a muchas comodidades y adelantos tecnológicos a los que hemos arribado luego de siglos de experimentación…
-Milenios.
-Si.
-¿Y entonces seguimos así, disfrutando de nuestras comodidades y avances en tecnología, disfrutando del mundo que hemos logrado fabricar, mientras no sabemos cuántos amaneceres más podremos ver? O, es más ¿seguimos disfrutando de todo aquello que nos “acomoda” pero que nos distrae y nos hace creer que no tenemos tiempo para ver un amanecer?
-Muchos han pasado su vida entera sin ver un amanecer. Hasta que no sepan lo que es, hasta que no queden en completo silencio y estado de contemplación ante lo magnánimo de un amanecer, dudo que quieran hacer algo para asegurar futuros amaneceres. Y además, hay otros a quienes no les interesa ver un amanecer, mucho menos asegurar que hayan futuros amaneceres, mientras que puedan seguir sientiéndose cómodos en el mundo que hemos creado.
-Y ahí es donde volvemos al principio. Al punto donde cada uno debe y puede hacer lo suyo, lo propio.
-¿Y por qué volvemos a ese punto?
-Porque lo propio es aquello que aceptamos dentro de nuestras creencias, nuestros conceptos. Habrán unos que comprenderán y harán ciertas cosas que otros no. No porque no quieran, sino porque no está dentro de su realidad.
-¿Y entonces cómo transmitir la urgencia del respeto por nuestro planeta si no está dentro de su realidad la necesidad de respetarlo?
-Conectando con ellos. Conectando con el concepto que ellos tienen de vida. Para comprender su perspectiva, y desde la comprensión, juntos, poder hacer.
-Lo veo y lo siento como un círculo del cual no puedo escapar, intentando responder algo que está más allá de mi comprensión.
-El que traza un círculo comienza en un punto y debe terminar en ese mismo punto para completar el círculo. ¿Quién es el punto aquí?
-Yo. Yo soy el punto.
-Exacto. Comienzo conmigo para terminar conmigo. Y en el camino, en el recorrido, cambio. Ya no seré el mismo al completar el círculo.
-Pero cuando llegue al punto de partida, entonces, ¡Todo de nuevo! Vuelvo al punto de inicio y vuelvo a transitar el mismo camino, el mismo círculo, hasta llegar, de nuevo, al punto final que no es más que el de partida, y así sucesivamente…
-No mires el círculo dibujado sobre un papel, en dos dimensiones. Te propongo que lo veas tridimensional. Ponte al nivel del círculo. Mírate recorrerlo. Al hacerlo te verás ganando experiencias, enriqueciendo tu ser, ampliando tu consciencia. Cuando hayas llegado al punto de partida no estarás al mismo nivel del que comenzaste, habrás creado un peldaño, te habrás elevado sobre tu propio punto de partida anterior y este punto final, que coincide con el nuevo punto de partida, estará más elevado. Y no sólo eso, también será más amplio, por lo que te permitirá trazar un círculo mayor al anterior, si ese es tu deseo.
-Como una espiral.
-Así es.
-Comienzo en mí para terminar en mí pero ya no soy el que fui cuando retorno a mí.
-Exacto.
-Veo mi camino desde otra perspectiva para conectar con el concepto que tengo de vida en ese momento, y me comprendo. Conecto conmigo. Y desde la comprensión puedo hacer.
-Exacto.
-…
-Y ahí es donde te descubres haciendo lo que te es posible y sientes qué debes hacer para conectar con la vida y con todo aquello que signifique conectar con la vida. Y eso incluye nuestro planeta. Y el concepto de mundo entonces se modifica, reconociendo que podemos avanzar tecnológicamente pero a la vez debemos contemplar y respetar al planeta. Que no es más que otro ser vivo recorriendo sus propios espirales de crecimiento.
-¿Entonces el planeta también tiene que conectar consigo mismo, en este espiral de autoconocimiento, para comprenderse, conectar con la vida y saber qué hacer?
-Sí. Pero eso lo dejamos para otro día.









Comentarios

  1. BIEN:LEÍ, PENSÉ, AGGIORNE,Y TODO CAYÓ EN UNA RUECA, POR LA CUÁL 🤔 DI VUELTAS MUCHAS VECES, PERO TAL CÓMO DICE LA AUTORA, CUÁNDO VOLVÍ A PASAR POR EL CÍRCULO, YA NO SOY,,

    ResponderBorrar
  2. LA REALIDAD TE VUELVE A INSISTIR UN CAMBIO RADICAL. DESEO, "no espero "HAGO Y VUELVO AL SER!!!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Los cambios son aliados en nuestro transitar. Cada cambio nos indica que estamos en movimiento, y si hay movimiento, hay Vida :)

      Borrar
  3. Bellos conceptos para mirar un presente de cambios urgentes y necesarios. Conceptos que apaciguan el andar, desde nuestro propio centro, nuestra propia espiral. Gracias!!!!! Graciela

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Así es, desde nuestra propia espiral para comprender el camino y unirnos con otrxs en la gran espiral de la Vida. Gracias por pasar por aquí, Graciela!!!

      Borrar
  4. Gracias a quienes pasan por aquí y dedican unos instantes de su tiempo a leer estas líneas. Cada comentario es bien recibido y permite el sano intercambio de miradas. Gracias!

    ResponderBorrar
  5. DEL CENTRO (ORIGEN)HACIA AFUERA. DÁ VUELTA LA RUECA. YA NO HAY CENTRO. VA CRECIENDO AQUÍ DÓNDE ESTÁ!!!COMBINA ASOMBRO AL VISUALIZAR..LUZ Y SOMBRA. Y LUEGO LLEGAR.

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Mis Maestras de Canto y Entrenamiento Vocal

A tu lado